Fiyi 89

Agosto de 1989

El encantador archipiélago de Fiyi se encuentra a unos 2.000 Km. al norte de Nueva Zelanda. Tiene una superficie equivalente a Suiza, y lleno de paisajes tropicales y de arrecifes de coral.

El fiyiano autóctono, especie de melanesio con carácter polinesio, es un hombre afable, hospitalario, ingenuo, simpático, lento, etc. a quien le en­canta charlar y ser útil a los turistas blancos. Son de religión maorí, hindú, musulmana, etc. Hay que tener en cuenta que junto con el fiyiano autóctono (50%) hay otro casi 50 % de origen indio, de ahí la variedad de religiones. El nativo es naif, ama las flores, (las que pone en su casa por todas partes, en su oreja, en un collar, o simplemente las re­gala), le gusta llevar falda tipo sharon o shari indio con bolsillos y camisa flo­reada polinesia tipo Hawai.

El fiyiano sonríe y te saluda al pasar por la calle y te dice "Bula” que significa: hola, adiós, qué tal, etc. Por el contrario los negocios están en manos de los indios sij que son los que controlan el capital y que realmente son gente desagradable, seca y que te tima si puede, siendo además orgullosos y hasta arrogantes. Poseen todas las tiendas.

Recorrí durante unos días la costa de coral de la isla VITI LEVU, la mayor de ellas, con una longitud de 200 Km., hospedándome en hoteles de lujo asiático que disponían de su propia playa, campo de golf, etc. por un precio irrisorio. En estos hoteles hay más de un empleado por cada cliente, lo que es comprensible cuando te enteras de que cobran 10.000 ptas al mes (60€). Jugué al golf y he de decir que lo hice bastante bien.

La vegetación es exuberante, llena de árboles con flores, hibiscus, gardenias, palmeras de todas clases y toda una serie de plantas propias del trópico. La papaya y la piña tropical fiyianas son de las mejores que he comido.

En este momento Fiyi está gobernada pon un dictador militar que dio un golpe de estado hace unos 3 años cuando la situación era la siguiente: El 48% de la población era fiyiana, es decir los primeros pobladores de Fiyi; el 29% lo componían los indios ( que procedentes de la India habían llegado hace unos 100 años con la misión de preparar campos de caña de azúcar en plantaciones británicas) y que hasta el día de hoy son considerados ciudadanos de segunda clase y no están autorizados a comprar terreno y el 3% restante eran Chinos, europeos, polinesios y melanesios.

El ejército está prácticamente formado sólo por fiyianos y dieron el golpe de estado ante el temor de que el partido laboral, que había ganado las elecciones, diera iguales dere­chos a los indios y el país fuera políticamente controlado por estos. A raíz de esta situación la Commonwealth decidió expulsar a Fiyi.

Durante 4 días navegué por el archipiélago de Yasawa, formado por decenas de pequeñas islas y lagunas azules que visité detenidamente, pasando la noche en el barco anclado frente a pequeñas playas llenas de palmeras cocoteras. Visité algunos poblados en los que la gente, muy hospitalaria, vive exclusivamente de la pesca, muy abundante, y tiene su pequeño huerto detrás de la cabaña. Se trata de pequeños poblados de unas 200 personas que viven en comunidad y regidos por un jefe de tribu quien dice lo que hay que hacer. Sus cabañas, construidas con ramas de palmeras (casi todo se hace de palmera en estos sitios), están muy bien hechas y he podido comprobar que ni las fuertes lluvias tropica­les dan goteras en el interior.

La mayor parte de las islas están rodeadas de arrecifes de coral de enorme belleza el cual puede verse, sencillamente, con gafas de submarinismo. La tripulación del barco era fiyiana nativa y resultaron todos ser gente dulce que tocaba la guitarra al atardecer y que te obsequiaban con flores y colla­res. Se bebía KAVA que es una especie de mate argentino formada por raíces machacadas con una enorme maza de hierro a las que añaden agua.

He de decir que sabe horrible. He jugado al rugby con ellos en las playas al atardecer y después de oscurecido cantábamos la canción fiyiana de "ISA LEI…" que no se qué significa, pero que me emocionaba. Estas islas son paradisíacas. Aquí se rodó no hace mucho la película "Blue Lagoon", Laguna Azul, sobre un niño y una niña que naufragan y van a parar a una de estas islas.

Pasé mi cumpleaños en estas islas. ! UN LUGAR DE ENSUEÑO !