Marzo de 2025
Volé de Madrid a Melbourne, con escala de un par de horas en Dubái, en el fabuloso A380-800 de Emiratos que ya había utilizado en otras ocasiones. El mayor avión del mundo. Con -47º centígrados en el exterior y 11 mil metros de altura recorrimos más de 7.500 millas en 12,5 horas bastante agradables y con excelente comida. Así que ya estaba en Melbourne tras añadir 10h a mi reloj que marcaba todavía la hora de España.
Melbourne, en cuestión de hoteles, es muchísimo más caro que Nueva York, Dubái y Sídney. Mi primer día con sus 35º a la sombra, su alta humedad y mi desfase horario, con 10 h de diferencia, hicieron que caminara por sus calles como si fuera un lagarto…los dos días siguientes fueron más frescos. Lo cierto es que marzo es un mes seco y no muy caluroso.
Sus edificios más singulares o emblemáticos están en la zona centro. El mercado de la Reina Victoria, la catedral, el Parlamento, la estación de trenes, Museo de la Ciudad, arte urbano, plaza Federación, barrio chino, el pequeño Italia, etc., y por supuesto por la costa se visitan los 12 Apóstoles, que son unas puntiagudas rocas a la orilla del mar.
Sus gentes son muy british, les guste oírlo o no. En los hoteles solo tienen sus enchufes y bases triples, típicamente británicas, y no tienen ni un solo adaptador que te pudieran prestar para una emergencia…en las calles de las áreas comerciales los peatones cruzan en masa los semáforos en rojo y los conductores son extremadamente pacientes con ellos.
La casualidad hizo que mi segundo día de visita fuera domingo y que se celebrara aquí la carrera anual de Fórmula 1 bajo una intensa lluvia. ¡Un inglés quedó el primero (Norris) y un español (Fernando Alonso) tuvo que retirarse…mala suerte!
Otros detalles: hay poquísimos fumadores, el importe del parking en las calles se paga con el móvil y si solo aparcas por 15 min no tienes que pagar, los repartidores de pizza llevan bicicletas eléctricas, no hay grafitis por las paredes, no usan jamás efectivo ni para comprar una botella de agua y en las compras uno mismo hace de cajero al tener todos los objetos su código de barras, etc. Al llegar a los hoteles el cliente entra en un ordenador de la recepción y obtiene la tarjeta de su habitación sin pasar por recepción. Cuidan más la ciudad que los europeos y hay tranvías gratis para evitar el uso del coche. Paseando tropecé con los novios de una boda que posaban en la escalera del Parlamento de Victoria.
. Es muy agradable dar paseos por las orillas del Río Yarra que circunda la ciudad. En mi opinión Sídney es más ciudad, más moderna, más arquitectura futurista, etc. mientras que Melbourne es más british y más cultural. Dicen que Sídney es el corazón de Australia y Melbourne es su alma…es la ciudad más habitable de Australia y una de las más agradables del mundo, aunque tiene un costo de vida muy alto. Melbourne tiene 7 millones y Sídney 8,5.